, tanto físicos como mentales. Como el deporte requiere, debe evitarse toda actividad perjudicial a la salud: el hábito del tabaco y el alcohol, ya que estos disminuyen la condición al momento de realizar los entrenamientos o bien cuando se lleva a cabo un combate.
- Dieta: la seriedad de atender al deporte por parte del atleta lo llevará a vigilar su dieta y sus hábitos en su alimentación, pues el ingerir comida y líquidos y el tiempo de digestión son factores a tomarse en cuenta para antes de las peleas, pues afectará el peso, la energía. El consumo de carbohidratos, de potasio y la hidratación del cuerpo son de notarse al balancear la dieta planeada del púgil, la que debe procurar los resultados más convenientes para cada boxeador.
- Entrenamiento: para iniciarse en el entrenamiento del boxeo, se requiere un largo período de preparación física, aprendiendo a respirar. Se comienza corriendo procurando que sea a una hora temprana y por lugares con árboles y terreno accidentado. Las primeras semanas se pueden correr entre 2 y 4 km, de forma acompasada y respirando por la nariz.
Una vez terminada la carrera se pasará al gimnasio, donde se practicarán ejercicios con los diversos aparatos, como la pera, la pera loca, el costal y la cuerda.
El boxeo es un deporte explosivo con alta demanda de trabajo anaeróbico, en donde es recomendable entrenar la resistencia a la fuerza explosiva, pudiendo entrenarla en el gimnasio contemplando unos porcentajes de RM, repeticiones, descansos y velocidad de ejecución. También hay otras formas de trabajarlo, como la pliometría o a través del crossfit, siendo este muy utilizado por luchadores de las artes marciales mixtas.